Con una segunda posible oleada de casos, CareBox permitirá a los sistemas sanitarios, en casi cualquier lugar, aumentar rápida y planificada sus instalaciones de cuidados críticos, proporcionando una solución eficiente y de bajo coste. Esto significa que los pacientes podrán ser tratados de manera efectiva hasta que la vacuna esté disponible, fomentando el correcto funcionamiento de la economía, sabiendo que sus sistemas de salud no se sobrecargarán.
CareBox también puede resultar valioso en los países en desarrollo, o en aquellos con una infraestructura sanitaria limitada. Una vez desplegado, CareBox podría permanecer en estas comunidades después de la pandemia para proporcionar instalaciones muy necesarias a largo plazo, o ser reubicada en otros lugares donde la necesidad es mayor.