La pandemia COVID-19 ha traído consigo desafíos sin precedentes tanto para las personas como para la sociedad. Muchas ciudades y pueblos en todo el mundo han llevado a cabo estrategias para hacer frente a estos desafíos y ahora están buscando soluciones permanentes para transformar el entorno urbano en lugares para las personas. A medida que el hemisferio norte avanza hacia los días más oscuros del invierno, y con más personas que acceden a los centros de las ciudades a pie y en bicicleta, la iluminación será esencial para que los centros de las ciudades puedan seguir comercializando y funcionando durante el invierno.
En este informe analizamos por qué ha llegado el momento de que los gobiernos locales se replanteen el valor del alumbrado urbano más allá de un simple complemento funcional para la seguridad o el adorno, y lo reconozcan como una solución para la recuperación económica, así como para la calidad de vida de los ciudadanos, tanto durante como después de la pandemia.
En colaboración con nuestros equipos de iluminación, masterplanning y economía, hemos puesto relieve nueve desafíos en la regeneración del centro de la ciudad y el papel de la iluminación como herramienta para tomar medidas prácticas. Nuestra selección de casos de estudio a nivel mundial se centra en el valor socioeconómico de la iluminación y cómo mejorar nuestra experiencia humana en los espacios públicos durante las horas de oscuridad. El informe concluye con una guía para desarrollar una estrategia integral de iluminación que cumpla con los objetivos de la ciudad para su regeneración.